Cuando decidí que quería realizar un MBA en EEUU, no tenía ni idea de lo largo y laborioso que resulta todo el proceso. Una vez entendida la magnitud del proceso, especialmente informado por los profesionales de Técnicas Lingüísticas Aplicadas, tuve clarísimo que mi aplicación pasaba por conseguir un GMAT elevado, como mínimo de 700 puntos. Es por eso que decidí apuntarme al curso para prepararlo.

Desde el primer día, supe que había acertado. Recuerdo especialmente una frase que dijo un profesor:“El GMAT es un juego, y hay que aprender a jugarlo siguiendo sus reglas”. En TLA nos enseñaron esas reglas, además de buenas técnicas para mejorar el rendimiento. En mi caso no tenía problemas en resolver los problemas de Quantitative, por mi formación técnica, pero tenía un problema de tiempo, que me ayudaron a resolver. Por otro lado, sabía que en Verbal necesitaría mucha más ayuda, y conseguí entender bien en qué consistía el juego en esta parte. Mi resultado fue bueno, 730, y sé que en gran parte gracias a la ayuda que recibí en Gmatbarcelona, no sólo en la parte académica, sino también en el apoyo y el ánimo que me brindaron en todo momento. Sé además que puedo contar con ese apoyo para el resto de mi aplicación, así que en conclusión sé que tomé la decisión adecuada cuando confié en este centro.

Jordi

GMAT 730.